Desde la época posterior a The Golliwogs que John Fogerty tiene que vivir con el concepto del "revival". Tanto, que su nuevo disco, lanzado a fines del año pasado, se llamó de esa manera. Y no llamó la atención, porque el verdadero evento fue que el compositor había regresado a las fuentes de su viejo sonido. El del rock más clásico y rústico, hitero pero áspero y, a la vez, amable.

Ese era el estilo de los mencionados The Golliwogs, una banda que se había formado alrededor de 1959 con el nombre The Blue Velvets. Ese trío instrumental, compuesto por John Fogerty, Doug Clifford y Stu Cook, realizaba espectáculos de música instrumental en un pueblo llamado El Cerrito, plena California estadounidense.

Tras un tiempo de espectáculos sin cantante, se incorporaron a Tom, hermano mayor de John, para algunos conciertos en fraternidades y un par de grabaciones para el sello Fantasy. En ese momento, el dueño del sello los convenció de cambiar el nombre de la banda. Con la firma The Golliwogs grabaron varios singles que fueron editados en el área de San Francisco sin demasiado éxito. Corría 1967 y el destino de la banda era incierto.

Para mayor pesimismo, llegó la hora de enlistarse en la armada. Parecía que ni John Fogerty ni Clifford se iban a salvar, pero los médicos los habilitaron sólo a hacer pequeñas tareas y luego a salirse del ejército.

Para cuando esto estuvo resuelto, los Golliwogs vieron que su sello era comprado por un tipo llamado Saul Zaentz, que propuso un nuevo cambio de nombre. Como de todas formas a ninguno le gustaba mucho el nombre anterior, le propusieron al nuevo jefe otro nombre: Creedence (en referencia al nombre de un amigo de Tom) Clearwater (por un aviso de cerveza con fines ecológicos) Revival (en función del compromiso renovado de los músicos para con ellos mismos). Zaentz compró y la sigla CCR comenzó a emerger dentro de la cultura pop más cerrada, mientras los cuatro músicos impulsaban sus ganas de ser artistas firmando la renuncia en sus respectivos empleos.

El primer disco fue homónimo y no tenía necesariamente todo lo que se necesitaba para ser un clásico. Pero no lo precisaba, porque en su lista de temas estaba Suzie Q, tema que comenzó a cimentar el éxito de la banda en radios AM de la zona.

Fantasy comenzaba a recaudar sus primeras ganancias y el grupo presentaba Bayou Country, su segundo golpe que llegó en agosto de 1969. En ese disco entró Proud Mary, la canción de la banda que más versiones ha tenido (casi 100). La cosa siguió creciendo con Green River, disco que llegó siete meses después y que sería Disco de Oro. El tema que le da nombre al disco, además, alcanzaría el segundo lugar en los charts de Billboard. También aparecería el esencial hit Bad moon rising.

Y luego llegaría la performance en Woodstock y aún más éxitos: Willy and the poor boys, que incluiría el hitazo Down on the corner a fin de año (sí, las discográficas exprimían a sus artistas en aquel tiempo y ellos respondían). En 1970 llegaría Cosmo´s factory, señalado por buena parte de la crítica como el mejor disco de la carrera de los CCR.

Pero las tensiones ya estaban ahí, con John Fogerty tratando de controlar todo el proceso creativo y el resto intentando tener su lugar. Para cuando Pendulum (1970) estaba vendiendo millones, Tom decidió dejar la banda y formar su proyecto solista. Fogerty reformuló la propuesta luego de la salida de su hermano y decidió que el trío se repartiría a partes iguales la producción del disco (cosa que los otros dos tampoco pretendían). Eso degeneró en un desastre llamado Mardi Gras, una grabación en la que, como era de esperarse, los palos fueron para las canciones de Cook y Clifford.

El hastío de John con el grupo terminó de crisparlo durante un concierto en la ciudad de Denver. Allí, los CCR fueron abucheados y víctimas de proyectiles. Una moneda dio en el ojo de Fogerty y el músico, al terminar el concierto, la echó a su bolsillo.

Así llegaría el comienzo de las carreras solistas y alguna reunión o proyecto puntual como Creedence Clearwater Revisited, que no prosperó demasiado, pero poco más hubo a partir de ahí.

los caimanes de fantasy. Tiempo antes de que la banda se separara, su sello les había propuesto a través de Zaentz ubicar sus ganancias (incluidas las obtenidas por la firma de un nuevo contrato) en un banco con sede en las Islas Caimán. Los cuatro integrantes de Creedence, junto con el sello, colocaron sus ahorros allí. En algún momento, Fantasy se dio cuenta de que la institución no era fiable y que mejor sacar todo de inmediato. Todos los CCR lo hicieron menos John, el único que no fue avisado.

Mientras el resto de sus compañeros evitaba la pérdida, John se quedó sin un peso y con un contrato que cumplir, ya que había dejado en claro que quería que sus otros compañeros quedaran libres dentro de la banda, aún cuando seguirían manteniendo regalías y derechos sobre los nuevos discos. Pero Fogerty nunca volvería a reformar Creedence, ya que después de unas giras durante el año 1972 como solista decidió no tocar más las canciones de Creedence y cortó su vinculación con la discográfica de Zaentz, renunciando a sus regalías. En ocasión de su primer lanzamiento como solista bajo el nombre The Blue Ridge Rangers, asociados a Fantasy enjuiciaron a Fogerty por haber producido música demasiado parecida a la que hacía en su etapa de compositor en Creedence. Harto de estar harto, Fogerty se desapareció durante ocho años, hasta 1985, cuando editó Centerfield.

Decidido a no tocar canciones de Creedence en sus giras, Fogerty hizo una excepción en febrero de 1987. Se encontraba tocando junto a Bob Dylan, George Harrison y Taj Mahal cuando Dylan le dijo que si no tocaba nunca más Proud Mary la gente pensaría que ese era un hit de Tina Turner, una de las tantas personas que versionó esa canción. Fogerty la tocó y volvió a realizar un show con temas de Creedence para fin de año, en un concierto organizado para los veteranos de la guerra de Vietnam. La carrera de Fogerty levantaría unos años después, en 1997, cuando su Blue moon swamp ganó el premio Grammy.

En 1990, Tom Fogerty muere de SIDA, aún peleado con su hermano. En 1993 la banda ingresó al Rock n´ roll Hall of Fame, presentados por Bruce Springsteen. Pero a la hora del concierto, Fogerty prescindió de sus dos compañeros restantes y tocó con "The Boss" y la E Street Band, ante la mirada atónita de ellos.

En 2005, Fogerty terminaría volviendo al sello Fantasy, que se había quedado a cargo de la distribución de la banda, pero al ser absorbida por el sello Geffen. Recién un año antes, los anteriores dueños del sello (otra empresa llamada Concord) restituyeron a Fogerty los derechos a recibir regalías negados por tantos años.

Pero hoy, con su nuevo disco Revival, Fogerty ya no parece necesitar eso. Se encuentra nominado al Grammy de nuevo y cuenta con el apoyo de la crítica a un músico que rescató un avejentado pero imprescindible sonido. La música lo devolvió a su lugar y el tiempo dejó claro que las guitarras de Creedence ya son un clásico dentro de la historia del rock mundial. Sebastian Auyanet - enero 2008